Las comunidades del sector de Nuevo Oriente han emitido una alerta urgente ante el desbordamiento del río León, una situación que ya está generando serias afectaciones en la movilidad entre la región del Urabá antioqueño y el corregimiento de Belén de Bajirá.
El nivel del agua ha subido considerablemente, cubriendo tramos de la vía principal y representando un riesgo alto para conductores, motociclistas y peatones. Habitantes del sector reportan que, además de la interrupción del paso vehicular, ya se evidencian afectaciones a viviendas cercanas y cultivos, lo que podría derivar en consecuencias económicas y sociales si las lluvias persisten.
Hasta el momento no hay un pronunciamiento oficial detallado, pero las comunidades insisten en la necesidad de una pronta intervención por parte de los organismos de gestión del riesgo, ya que el panorama sigue siendo incierto y podría agravarse.
Este hecho pone nuevamente en evidencia la vulnerabilidad de las comunidades rurales frente al cambio climático y la falta de infraestructura resiliente, especialmente en regiones como Urabá, donde las vías son determinantes para la conexión económica y social del territorio.