Durante la instalación del Congreso, el presidente Gustavo Petro expresó su arrepentimiento por haber nombrado a Olmedo López, exdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), quien se encuentra en el centro de un escándalo de corrupción. En su discurso del 20 de julio, día de la independencia, Petro comenzó pidiendo disculpas: “Quiero comenzar estas palabras pidiéndoles perdón”.
El presidente asumió la responsabilidad por esta decisión, afirmando: “Tengo que pedir perdón porque yo fui el que lo puse ahí”. López ha confesado ante la Corte Suprema que utilizó fondos públicos para sobornar a congresistas con el fin de obtener votos favorables al gobierno, dinero que debía ser destinado a atender emergencias.
A pesar de su implicación en el escándalo, López no ha señalado directamente al presidente, e incluso le ha solicitado perdón por su participación en actos corruptos. Petro defendió a López, señalando que nunca fue una transacción política y que proviene de la izquierda: “El señor Olmedo nunca fue una transacción política de ningún grupo; viene de la izquierda”.
Olmedo López es miembro del partido Polo Democrático, del cual también formó parte Petro antes de renunciar tras otro escándalo de corrupción relacionado con Samuel Moreno, exalcalde de Bogotá. Para el presidente, esta situación demuestra que “el tema de la corrupción no es un tema ideológico”, sino que se trata de una cultura que permea todos los estratos sociales.
Es importante destacar que Petro no está asumiendo responsabilidad penal en este caso, ya que sus disculpas están dirigidas a aceptar una responsabilidad política. En cuanto a la responsabilidad penal, se centró únicamente en López: “Que un hombre se degrade de esa manera es terrible”, concluyó el presidente.