La pequeña Liseth Paola Peralta fue sepultada en un emotivo funeral el domingo 4 de agosto de 2024, en Llano Rico, Bajirá, en medio del profundo dolor y repudio de la comunidad. La ceremonia contó con la masiva asistencia de habitantes de Caño Montería, Carmen del Darién y Bajirá, quienes se unieron para rendir homenaje a la niña de 11 años, víctima de un cruel abuso y asesinato el pasado 1 de agosto.

Liseth era estudiante de sexto grado en la institución educativa de Caño Montería, ubicada a 30 kilómetros de Nuevo Belén de Bajirá. El día de su desaparición, salió a clases y, al no regresar a casa al mediodía, su familia comenzó a buscarla con urgencia. Gracias a la solidaridad de la comunidad, su cuerpo fue hallado esa misma tarde en una trocha, presentando evidencias de abuso y dos heridas de arma blanca.

Durante la búsqueda del presunto responsable, uno de los pobladores exaltados comentó: «El tipo se nos voló por un pajonal, cuando pretendíamos capturarlo». Por otro lado, se ha difundido a través de cadenas de WhatsApp el nombre y las fotos del sospechoso, quien logró escapar hacia la vereda Despensa Baja y cruzó el río Curbaradó.

La comunidad está profundamente afectada psicológicamente y clama por justicia. «Esperamos que ahora que somos conocidos infortunadamente por una mala noticia, encontremos el respaldo del gobierno para que nos acompañe con créditos, asistencia técnica y comercialización de nuestros productos», añadieron los pobladores. Este trágico suceso ha conmocionado a la región y generado un clamor por respuestas efectivas por parte de las autoridades.