El corazón de San Pedro de Urabá se ha estremecido con una pérdida irreparable. Un incendio devorador se llevó la vida de una pequeña de tan solo 11 meses, dejando dolor y consternación en la comunidad.

La noche del pasado 29 de agosto alrededor de las 8:00 p.m., el fuego consumió una humilde vivienda en un sector rural, arrebatándole la vida a esta inocente criatura. La vela, una simple llama que iluminaba la noche, se convirtió en una fiera implacable que segó una vida llena de promesas.

Los padres, desconsolados y según la hipótesis salieron por un momento a una casa vecina, cuando regresaron a su hogar para encontraron la peor pesadilla hecha realidad. A pesar de los desesperados esfuerzos de los vecinos y los bomberos, nada pudo evitar la tragedia. La pequeña, dulce y llena de vida, se había convertido en una estrella más que brilla en el firmamento.

El alcalde, Never Carvajal, expresó su más sentido pésame a la familia y aseguró que la administración municipal brindará todo el apoyo necesario en estos momentos de profundo dolor.