Dairo Antonio Úsuga David, alias Otoniel, exlíder del Clan del Golfo y uno de los narcotraficantes más temidos del país, estaría dispuesto a entregar información explosiva a la justicia de Estados Unidos a cambio de una reducción en su condena de 45 años. Según reveló la revista Semana, el capo negocia bajo estricta confidencialidad con fiscales estadounidenses, revelando una serie de vínculos oscuros entre su organización criminal, miembros de la Fuerza Pública, políticos colombianos y carteles internacionales.

Actualmente recluido en la cárcel de máxima seguridad ADX Florence, en Colorado, Otoniel entregó un documento conocido como “profile”, que detalla su disposición para declarar sobre diversos temas de interés para las autoridades norteamericanas, incluyendo rutas de narcotráfico, lavado de dinero y tráfico de migrantes.

Entre los nombres ya mencionados figura el del exgobernador de Arauca, Julio Enrique Acosta, señalado por presuntos vínculos con el paramilitarismo. También implicó a miembros de partidos políticos como la Unión Patriótica y el Partido Comunista, y aseguró que altos mandos militares habrían colaborado directa o indirectamente con su organización mientras él lideraba el Clan del Golfo desde la clandestinidad.

El ventilador que puede reescribir la historia reciente

Los datos que Otoniel promete entregar podrían destapar una compleja red de corrupción que ha permeado las estructuras institucionales del país durante décadas. Según el medio citado, el excapo busca beneficios similares a los obtenidos por otros narcotraficantes que colaboraron con la justicia estadounidense, como Juan Carlos Ramírez Abadía, alias Chupeta, quien ayudó a derribar al ‘Chapo’ Guzmán y logró una notable rebaja en su pena.

Entre los temas más sensibles que tocaría alias Otoniel se encuentra el lavado de activos. Asegura poder identificar empresarios, banqueros y otros actores clave que participaron en la legalización del dinero ilícito. Esta línea de colaboración es especialmente valiosa para las autoridades de EE. UU., que enfocan su ofensiva contra el narcotráfico en desmantelar las estructuras financieras que lo sostienen.

Además, se espera que detalle el rol del Clan del Golfo en el tráfico de migrantes por el Tapón del Darién, una zona neurálgica utilizada por miles de personas que buscan llegar a Estados Unidos. La organización cobraba peajes por permitir el paso, ejerciendo control absoluto sobre la ruta y generando millonarias ganancias.

¿Se reducirá su condena?

Aunque el proceso de colaboración avanza, aún no hay garantías de que el excapo obtenga una reducción de su sentencia. Todo dependerá de la calidad y veracidad de la información que aporte, así como de su utilidad para futuras investigaciones judiciales tanto en Colombia como en el exterior.

Esta nueva fase del caso Otoniel podría tener repercusiones profundas en la política nacional. Si las pruebas que promete entregar logran comprobarse, el país podría enfrentar uno de los mayores escándalos de connivencia entre el narcotráfico, sectores del poder político y miembros activos de la Fuerza Pública.

El ventilador ya empezó a girar. Y Colombia podría no volver a ser la misma.

Por yujalon99