Un nuevo episodio de violencia se suma al caso de Lyan Hortúa, el niño de 11 años que fue secuestrado en Jamundí, Valle del Cauca. Este jueves se conoció el asesinato de un familiar del menor, quien habría sido la persona encargada de entregar el dinero del rescate exigido por los captores.
El hecho ocurrió en la ciudad de Cali. La víctima fue interceptada por hombres armados después de realizar la entrega del dinero a cambio de la liberación de Lyan. De acuerdo con el personero de Cali, Gerardo Mendoza, la víctima sería quien se encargó personalmente del pago.
Lyan Hortúa fue secuestrado el pasado 3 de mayo mientras se dirigía a la tienda en el barrio Bella Vista, en Jamundí. Su desaparición generó una intensa movilización en redes sociales y medios de comunicación, hasta que finalmente fue liberado el 21 de mayo, tras 18 días en poder de sus captores.
El crimen del familiar, ocurrido apenas horas después de la liberación del menor, ha generado gran indignación y consternación. Aunque las autoridades aún no han confirmado los autores del homicidio, el caso está siendo investigado como parte del mismo entramado delictivo relacionado con el secuestro.
Este hecho pone en evidencia la grave situación de seguridad en el sur del Valle del Cauca, donde grupos armados ilegales siguen ejerciendo control y generando temor en la población. Organismos defensores de derechos humanos y líderes sociales han exigido respuestas contundentes por parte del Estado para evitar que este tipo de crímenes continúen ocurriendo.