•En un contenedor encontraron a dos jóvenes muertos en la Autopista Sur. El Gremio de los camioneros dice que los controles son insuficientes en las vías regionales.

Durante un extenso recorrido a lo largo de tres municipios, un camión transportó los cuerpos de dos jóvenes y otro gravemente herido, despertando la atención de los conductores en la Autopista Sur el pasado lunes. Esta dolorosa realidad destapó la problemática de los polizones en las carreteras del departamento, con al menos 40 personas siendo captadas diariamente en camiones de forma irregular, esta cifra probablemente diste mucho de la realidad debido a que pueden ser muchas más las personas que se suben de forma irregular a estos tractocamiones.

Los líderes gremiales de los conductores reconocen la complejidad de este problema, que persiste a pesar de los esfuerzos de la Policía de Tránsito, el Ejército y otras entidades. Ánderson Quiceno, representante legal de la Asociación de Transportadores de Carga (ATC), detalló que los polizones se dividen en migrantes, aficionados de fútbol y aquellos que buscan viajar sin destino claro, todos enfrentando problemas de seguridad.

En Antioquia, los polizones eligen estratégicamente lugares como la Y de Primavera en Caldas, el peaje del Trapiche en Barbosa, el barrio Zamora en Bello, y el peaje del Túnel de Occidente en Medellín que conduce a Urabá, para abordar los camiones sin ser notados.

Quiceno explicó que los polizones suelen subirse a los techos de los contenedores y que, lamentablemente, llegan abogados instaurando demandas contra conductores y empresas sin que estos estén al tanto de la presencia de los viajeros ilegales.

Además de los grupos mencionados, se suman los caminantes que obstruyen la movilidad de los vehículos para luego robarlos. Las autoridades, incluyendo el Ministerio de Defensa, la Policía, el Ejército y otras entidades, han implementado estrategias para combatir este fenómeno y garantizar la seguridad vial, pero las limitaciones persisten.

A pesar de los esfuerzos, casos como el recorrido sin detección del camión que transportaba a los jóvenes fallecidos resaltan las deficiencias en la ejecución de operativos, especialmente en tramos con presencia policial disminuida debido a restricciones logísticas. Mientras tanto, los polizones continúan viajando, a menudo encontrando un destino trágico sin que los conductores estén al tanto.