Más de 150 niños y niñas de Chigorodó, Apartadó y Carepa son los principales afectados por las inundaciones y daños en sus escuelas rurales debido a las fuertes precipitaciones de las últimas semanas.

Las autoridades educativas y de gestión del riesgo de la Gobernación de Antioquia trabajan en conjunto para encontrar soluciones temporales que permitan a los estudiantes retomar sus clases mientras se repara o reconstruye su infraestructura educativa.

Es importante garantizar el derecho a la educación de todos los niños y niñas, incluso en situaciones de emergencia como esta.

“En este momento la Secretaría de Educación viene haciendo el censo, también identificando que estos colegios e instituciones educativas están en la ruralidad, y obviamente llegar a estos municipios ha sido complejo también por la dificultad que hay de la temporada de lluvias y pues obviamente estos municipios también con esa condición de estar incomunicados, pues el censo se hace mucho más complejo”, explicó el director del Dagran, Carlos Ríos.