En un ambiente de tensión y desorden, el expresidente César Gaviria fue reelegido este jueves como director del Partido Liberal, obteniendo 582 votos. La jornada estuvo marcada por enfrentamientos verbales y denuncias de fraude, lo que generó un clima de controversia.

El principal contendiente de Gaviria, Luis Fernando Velasco, exministro del Interior, no logró superar a su oponente. Tras los resultados, Velasco criticó la falta de democracia en el partido, señalando que «llegamos a una convención después de 20 años de un partido manejado por una familia», refiriéndose al dominio que ha tenido la familia Gaviria en el liberalismo.

El evento, que convocó a numerosos asistentes, también se vio afectado por improvisaciones y retrasos, a pesar de la masiva participación. Jaime Alberto Jaramillo, secretario del Partido Liberal, informó que se solicitó la intervención de la fuerza pública debido a que «estaban lanzando objetos contundentes desde ciertos lugares».

La convención, aunque celebrada con entusiasmo por algunos, dejó en evidencia las fracturas y tensiones que aún persisten dentro del partido.