La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD) han desentrañado el misterio detrás de dos cuerpos hallados en la Escombrera de Medellín. Los restos corresponden a una joven de 20 años y un vendedor ambulante de 28 años, ambas víctimas de desaparición forzada en 2002.
La joven, que era coordinadora de un grupo juvenil deportivo, desapareció el 30 de julio de 2002 a manos del Bloque Cacique Nutibara. Él hombre, que padecía una discapacidad, desapareció el 13 de octubre de 2002 al salir de su casa. Ambos eran originarios de la Comuna 13 y del corregimiento de San Cristóbal.
La JEP y la UBPD han encontrado restos humanos de cuatro personas en la zona de excavación, correspondiente al período 2002-2004. Estos años registraron el mayor número de desapariciones forzadas en el occidente de Medellín.
La JEP destacó que las víctimas eran «personas completamente ajenas al conflicto armado» y que no tenían antecedentes penales. Los nombres de las víctimas no fueron revelados por respeto y seguridad hacia sus familiares.
La identificación de los cuerpos es un paso importante en la búsqueda de la verdad y la justicia para las víctimas y sus familias. La JEP y la UBPD continúan trabajando para esclarecer los hechos y brindar consuelo a las familias de las víctimas.
