No habian registros de este ejemplar desde 1936 y un equipo de científicos de la Universidad de Sudáfrica anunció el descubrimiento de esta especie de topo sin ojos que se creía extinta.

El animal, llamado topo dorado de De Winton (Cryptochloris wintoni), fue encontrado en la región de las dunas de la costa sudafricana, específicamente en Port Nolloth, al norte del Cabo.

El topo dorado de De Winton es un pequeño mamífero insectívoro que mide entre 10 y 12 centímetros de largo. Su pelaje es de color dorado y sus ojos no son funcionales, lo que sugiere que es un animal subterráneo que no necesita ver para orientarse.