En un consejo de seguridad realizado en Necoclí, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, subrayó la creciente necesidad de construir una cárcel departamental en Urabá. La falta de infraestructura penitenciaria en la región ha obligado a los policías a realizar tareas de custodia de detenidos en las estaciones de Policía, lo que afecta la capacidad operativa de las fuerzas de seguridad. Rendón propuso la construcción de una cárcel con mil nuevos cupos para aliviar esta situación.

La región del Urabá enfrenta una compleja situación de seguridad, marcada por la presencia de grupos armados ilegales involucrados en microtráfico, narcotráfico y el tráfico de migrantes. La escasez de policías en la zona agrava aún más el panorama, pues muchos efectivos deben dedicar su tiempo a la custodia de los privados de libertad, en lugar de realizar labores de patrullaje y prevención.

El gobernador también destacó la importancia de utilizar tecnología para fortalecer las capacidades de la fuerza pública y mejorar la seguridad en los municipios. Además, hizo un llamado a la ciudadanía a colaborar con las autoridades para combatir la delincuencia.

Por otro lado, Rendón anunció que la Gobernación implementará un plan conjunto con varias secretarías para abordar la violencia intrafamiliar y proteger a mujeres y niños en situación de vulnerabilidad en los hogares.