En un esfuerzo conjunto por la conservación de las Tortugas Caná (Dermochelys coriacea), los Guardianes de la Playa de CORPOURABA han iniciado una jornada de investigación nocturna en la Playa Bobalito de Necoclí. Durante varias noches, estos dedicados guardianes instalarán sensores satelitales y chips de monitoreo en las tortugas durante su desove, lo que permitirá un seguimiento más detallado de sus patrones migratorios y comportamiento.
La iniciativa, que cuenta con el apoyo técnico de la Fundación Tortugas del Mar y The Leatherback Project, busca recopilar datos que serán cruciales para la protección y conservación de esta especie en peligro. La Playa Bobalito, conocida por ser un sitio privilegiado para el desove de varias especies de tortugas marinas, se ha convertido en un laboratorio natural para los esfuerzos de conservación.
Este proyecto no solo es un paso adelante en la ciencia de la conservación marina, sino que también representa la colaboración exitosa entre organizaciones locales e internacionales dedicadas al cuidado de la biodiversidad marina. Con la información recopilada, se espera desarrollar estrategias más efectivas para la protección de las Tortugas Caná y su hábitat en la región de Urabá.
La comunidad local, que ha sido testigo del nacimiento de tortugas marinas en estas playas, celebra este avance y se mantiene esperanzada en que las acciones tomadas hoy asegurarán la supervivencia de las tortugas para las futuras generaciones.