Uno de los dichos más recordados del científico fue «no podemos resolver un problema si razonamos de la misma manera en la que razonamos para crearlo», por lo que el físico siempre buscaba nuevas perspectivas para agilizar sus capacidades de resolución.
Einstein era un fiel creyente de que el análisis y el raciocinio podían hacer maravillas a la hora de resolver dificultades, pues otro de sus icónicos dichos sostiene que «la imaginación es la forma de investigación más efectiva».
De hecho, gran cantidad de sus postulados pudieron llevarse a cabo gracias a que a los 16 años se imagino a sí mismo viajando con un rayo de luz, incógnita que permitió el nacimiento de dos de los mayores avances que tuvo la física en el siglo XX: la teoría de la relatividad y la teoría cuántica.
El consejo de Albert Einstein para prevenir y resolver problemas.
«una vida humilde y tranquila trae más felicidad que la persecución del éxito y la constante inquietud que implica»,