Fenalco y gremios del sector advierten que las nuevas cargas laborales pueden llevar al cierre masivo de mipymes y la pérdida de más de 450 mil empleos.

La aprobación en tercer debate de la reforma laboral en el Senado ha encendido las alarmas entre empresarios y gremios en Colombia. Según Jaime Cabal, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes Empresarios (Fenalco), las nuevas disposiciones como el adelanto del fin de la jornada diurna a las 7:00 p.m. y el aumento del recargo dominical y festivo representan un incremento del 18% al 35% en los costos laborales para las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), poniendo en riesgo su estabilidad económica.

“Estas medidas desconocen la realidad del país. Aumentan los costos sin reducir la informalidad, y castigan a los sectores que más empleo generan”, afirmó Cabal, al advertir que sectores como panaderías, tiendas de barrio, cafeterías, restaurantes, bares, hoteles, transporte, vigilancia y aseo serían los más afectados.

Las cifras son preocupantes: de las más de 24.000 panaderías existentes en Colombia, el 85% pertenece al sector informal o de barrio, que difícilmente podría absorber los aumentos derivados de la reforma. Fenalco, el Banco de la República y Fedesarrollo advierten una posible pérdida de hasta 454.000 empleos si se implementa el articulado tal como está.

Por su parte, Jaime López, presidente de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica (Acodres), expresó durante el foro “Sectores que mueven el empleo” que el impacto va más allá de lo económico. “El sector gastronómico da el primer empleo a muchos jóvenes y el último a adultos mayores. Si se pierden estos trabajos, ¿qué opciones reales les quedan a estas personas?”, cuestionó.

Desde Asobares, la directora jurídica Andrea Chaparro también rechazó la reforma tal como está planteada. “Queremos el bienestar de los trabajadores, pero no podemos sostener cargas que destruyen el tejido empresarial. Si las mipymes colapsan, los empleos también”, señaló.
Cabal concluyó con un llamado urgente al Senado: “Todavía hay tiempo de corregir. Esta reforma, tal como está, no construye, destruye. Y quienes más lo sentirán serán las familias que dependen de estos pequeños negocios”.
Impacto directo:

• Aumento de hasta 35% en costos laborales.

• Riesgo de cierre para miles de panaderías, cafeterías y bares.

• Más de 450.000 empleos en peligro.

• Golpe a la empleabilidad de jóvenes y adultos mayores.

El país está en una encrucijada: reformar sin destruir o enfrentar una ola de desempleo y cierres masivos que podría costar más que cualquier reforma.

Por yujalon99