En un lamentable hecho ocurrido en el barrio El Esmeraldal de Envigado, una familia vivió una doble tragedia que terminó con la muerte de una abuela de 78 años y su nieto de dos. El suceso, que tuvo lugar durante el puente festivo, comenzó cuando la adulta mayor sufrió un infarto fulminante mientras cuidaba a su nieto, lo que derivó en la asfixia accidental del niño.

Según los informes judiciales, en la mañana del trágico suceso, el pequeño, como era habitual, se acostó al lado de su abuela para dormir. Poco después, la mujer sufrió un infarto mientras estaba junto al niño, lo que ocasionó varios movimientos violentos en su cuerpo. En medio de esta situación, la señora falleció y, en uno de sus movimientos reflejos, su cuerpo cayó sobre el menor, atrapándolo y causándole la asfixia.

El menor fue encontrado sin vida poco tiempo después. La Policía Metropolitana, a través de su Sijín, realizó la inspección al cuerpo del niño, mientras que un médico legista dictaminó que la muerte de la abuela fue por causas naturales, relacionadas con complicaciones de salud derivadas de su hipertensión y otros problemas asociados a su edad avanzada.

Se conoció que en el momento de los hechos, los padres del niño se encontraban trabajando en el sur del Valle de Aburrá: el padre, como médico intensivista, y la madre, como jefe de enfermería en un centro asistencial.

Tras conocerse la tragedia, la Secretaría de Salud de Envigado acudió al lugar para brindar apoyo psicológico a los padres, quienes atravesaron una dolorosa y devastadora experiencia familiar.